Tamayo, Bahoruco. – Lo que debería ser un espacio para garantizar alimentos a familias de escasos recursos, se ha convertido en una amenaza para la salud de toda una comunidad. Desde hace más de dos semanas, el Comedor Económico de Tamayo, ubicado en la calle Mella esquina San Antonio, mantiene un desbordamiento séptico que ha transformado la zona en un foco de insalubridad y contaminación.
Según el medio digital Surfecundo destaca que los vecinos del sector La Altagracia denuncian que las aguas residuales corren libremente por los contenes y se estancan detrás del local, generando un hedor insoportable que no solo afecta a los residentes, sino también a quienes acuden diariamente al comedor en busca de un plato de comida.
Lo más alarmante es que este problema no es nuevo. Ya ha ocurrido en otras ocasiones, pero esta vez la indiferencia de las autoridades ha permitido que la situación se prolongue por semanas, sin aplicar una solución real.
Ni los esfuerzos de las amas de casa limpiando sus hogares, ni el trabajo del ayuntamiento recogiendo aguas y desechos, logran contrarrestar la gravedad del problema. Mientras tanto, la comunidad vive expuesta a un riesgo sanitario que podría derivar en brotes de enfermedades.
Ante este panorama, los moradores responsabilizan directamente al director de los Comedores Económicos del Estado, Edgar Augusto Féliz Méndez, y a las autoridades de Salud Pública, de cualquier situación que se produzca si no intervienen de inmediato. La paciencia se agotó: Tamayo no necesita paños tibios, sino soluciones definitivas.